La revista de Las Rozas y comarca, Mataborricos.com, nos cuenta que el pasado día 11 la selección de fútbol española más conocida como «La Roja» abandonó la Ciudad de Fútbol de Las Rozas casi con honores de Estado. Hablemos con propiedad: «La Selección española de fútbol ha estado entrenando en el asentamiento ilegal de la Ciudad del fútbol sin que a nadie parezca importarle mucho». Podemos decir que «La Roja» ha sido okupa en Las Rozas durante una buena temporada». Y eso se puede decir sin cortarnos lo más mínimo.
Según nos cuenta la revista y tal y como nos habíamos hecho eco en este blog, «El pasado día 3 de marzo, el Tribunal Supremo ratificó en sentencia firme y contra la que no cabe recurso que el asentamiento de la Ciudad del Fútbol de las Rozas es ilegal, y anuló el acuerdo suscrito por el Ayuntamiento, presidido por Bonifacio de Santiago, y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Todo comienza en el año 1999, cuando Izquierda Unida de Las Rozas decide denunciar la cesión de los terrenos a la RFEF por considerar que éstos eran demaniales, es decir, públicos y para uso público. Once años después y tras haberse agotado todos los recursos interpuestos por Bonifacio de Santiago y la Federación de Fútbol, el Tribunal Supremo confirmó la sospechas de IU y considera que la actividad en esos terrenos no está al servicio de los vecinos pese a ser su suelo de carácter público. Además el Tribunal condenó tanto al Ayuntamiento como a la RFEF a pagar las costas del juicio, una medida que no suele aplicarse contra las administraciones públicas al considerarse que siempre actúan de buena fe, movidas por el interés de los ciudadanos».
La Ciudad del Fútbol de las Rozas es un Centro Okupado, lo que no parece ser un Centro Social Okupado y Autogestionado como sí lo es La Fábrika. Dos instalaciones okupadas con un tratamiento totalmente distinto por los poderes públicos.
Mientras en el primero el alcalde de Las Rozas (PP) sigue justificando la «cesión» ilegal de 120.000 metros cuadrados de suelo público a la Federación del Fútbol en el segundo caso, el alcalde de Villalba (PSOE) ha hecho una auténtica persecución al colectivo de la Fábrika.
Mientras que en el primero el terreno okupado de manera ilegal es utilizado por futbolistas con primas astronómicas y sueldos desorbitados para darle forma al cuerpo de manera gratuita, el segundo es utilizado por distintos movimientos para fines sociales.
Mientras que en el primero el Gobierno y la Casa Real hacen la vista gorda con el expolio de suelo al pueblo de Las Rozas y visitan las instalaciones con el pretexto del mundial, en el segundo son reprimidos por las instituciones del Estado.
Mientras que en el primero existe orden de resarcir los daños al pueblo de Las Rozas y el alcalde ya ha recibido varios «toques» judiciales por desacato a las sentencias sin que esa «insumisión» a la justicia parezca importar mucho a nadie, en el segundo tienen la orden de desalojo en marcha y casi con toda seguridad se haga cumplir por la policía porra en mano.
Resulta asombroso, ¿verdad? El otro día decía que La Fábrika supondrá un antes y un después de los Centros Okupados de la Sierra. Podrían tomar como ejemplo el otro que ahora existe, el de la Ciudad del Fútbol, y buscar las triquiñuelas legales y no legales para que siga existiendo. Tal vez el problema radique en que el fútbol es el opio del pueblo y «lo social» hoy en día, según algunos, no tiene mucho sentido.